Características de las cortinas romanas:
Diseño y estructura:
Pliegues horizontales: Cuando se suben, las cortinas romanas forman pliegues uniformes que se apilan uno sobre otro. Cuando están completamente extendidas, la tela queda plana y lisa.
Variedad de telas: Pueden estar hechas de una amplia gama de tejidos, desde materiales ligeros y translúcidos hasta telas gruesas y opacas, lo que permite adaptarlas a diferentes necesidades de luz y privacidad.
Funcionamiento:
Mecanismo de levantamiento: Se operan mediante un sistema de cordones o una cadena que permite subir o bajar la cortina, ajustando así la cantidad de luz que entra en la habitación.
Fácil instalación: Suelen ser fáciles de instalar y se pueden montar dentro o fuera del marco de la ventana.
Estética:
Versatilidad: Su diseño elegante y clásico las hace adecuadas para una variedad de estilos de decoración, desde el tradicional hasta el contemporáneo.
Personalización: Disponibles en una amplia gama de colores, patrones y texturas, lo que permite personalizarlas según el estilo y la decoración de la habitación.